Los días que no voy al club voy al gimnasio, donde procuro dedicarle una hora. La verdad es que no lo hago con placer, pero ya me he acostumbrado a ello por lo que procuro que sea lo menos monótono posible. Cada día realizo una actividad diferente, desde natación, spinning, tonificación y dos días salgo a correr por los alrededores de las instalaciones.
Es una manera de sentirme ágil y fuerte, siento que podría responder correctamente ante cualquier problema que se me presentara...
Comentarios
Publicar un comentario